¿Piensas en positivo o en negativo?
Como decía Henry Ford: “Tanto si piensas que puedes, como si piensas que no puedes, estás en lo cierto”.
Probablemente conoces a esas personas que se quejan de todo, o a lo mejor tú eres una de ellas. Que todo lo ven negro. Que ven el vaso siempre medio vacío. La verdad no es nada agradable estar con alguien así. Y en muchas ocasiones, nos pueden contagiar fácilmente y hacer que terminemos pensando igual.
Para evitar esto, lo primero que debemos hacer es alejarnos de esas personas. Después, analizar si nosotros estamos en ese caso también. Y de ser así, trabajar por nosotros mismos o con la ayuda de algún especialista para cambiar nuestros pensamientos.
Al mismo tiempo, hay que alejarnos de los noticieros, sea en radio, televisión o redes sociales. En el entendido de que, para sobrevivir, los medios requieren de audiencia y lamentablemente las noticias que más venden son las amarillistas. Muerte, violencia, delincuencia, asaltos, agresiones, etc., son las que se escuchan o se leen en ellos.
Esto sólo provoca en las personas miedo, preocupación y estrés que le hacen pensar que todo está mal y que no hay salida.
En su lugar, hay que buscar programas, artículos y, aprovechando la tecnología, audios y videos sobre aquellos temas que nos ayuden tanto en lo personal, como en nuestro trabajo o profesión.
Además de lo anterior, las enseñanzas y lo que aprendemos desde chicos es a vivir siempre preocupados, pensar siempre en negativo. Como dice el refrán: “Piensa mal y acertarás”.
Revisa por un momento qué es lo que pasa por tu mente cuando estás esperando algo. Puede ser el resultado de un examen, la respuesta sobre un trabajo, el regreso de los hijos de una fiesta, el resultado de un estudio médico, etc. Lo más probable es que tu pensamiento sea, en la mayoría de los casos, negativo. Que estés preocupado porque esperas una respuesta que no es la que quieres. Te preocupas, a veces te angustias e inevitablemente te estresas.
Ahora piensa, ¿Cuántas de esas ocasiones, cuando te preocupas y esperas lo peor, sucede ese resultado catastrófico? La verdad es que podemos decir que casi nunca sucede: sólo nos preocupamos por nada.
Esto de pensar en forma negativa también afecta en nuestras finanzas personales. Nuestros pensamientos de carencia o de pobreza, de que no alcanza, nos hace vivir limitados y siempre preocupados.
Te invito a que, en primer lugar, evites a las personas tóxicas, a las que siempre se expresan mal de todo, que le echan la culpa a los demás de lo que ellos deben resolver. Luego deja de ver noticias amarillistas que sólo envenenan tu mente.
Y después transforma tus pensamientos en positivo. Imagina desde que inicias tu día que todo va a estar bien. Que las cosas van a fluir. Y cuando algo no salga como lo deseas, no temas, busca la forma de que sea como tú quieres. La solución está en ti.
Te invito a que pienses en positivo. Que creas en ti. Que confíes en que lograrás lo que te propongas. Evita preocuparte y mejor ocúpate. Los resultados se darán.
Hasta el próximo.
