¿Quieres salir de deudas? Consíguelo en 4 pasos.
Uno de los principales problemas de las finanzas personales es el manejo de las deudas. A la mayoría de las personas que entrevisto —después de revisar sus necesidades y determinar cuál es el seguro que más les conviene—, les pregunto: “¿Con qué tarjeta lo vas a pagar?”. Su respuesta es: “La tengo o las tengo hasta el tope”.
Nos gusta endeudarnos y después no sabemos cómo salir de ello.
Existen deudas buenas, deudas malas y deudas de apoyo. A saber, las deudas buenas son aquellas que nos ayudan a incrementar nuestro patrimonio, como una hipoteca para comprar una casa y dejar de pagar renta o, si ya tenemos casa propia, adquirir otra y rentarla.
Las deudas malas son las que provocan la pérdida de nuestros ingresos, como las deudas con agiotistas, quienes cobran intereses exorbitantes, o las deudas descontroladas en tarjetas de crédito, donde pagamos intereses muy altos.
Las deudas de apoyo son, como dijo un ilustre mexicano, las que “ni nos benefician, ni nos perjudican”, pero ahí están. Estas son deudas en tarjetas de crédito controladas, que pagamos en su totalidad, evitando los intereses; los préstamos de familiares o amigos, que no nos cobran intereses y que, a veces, ni siquiera pagamos, lo cual está muy mal.
Ahora bien, si tus deudas están fuera de control y no te dejan dormir, imagina por un momento que, por arte de magia, éstas desaparecieran. ¿Cómo te sentirías?
Te tengo una buena y una mala noticia. ¿Cuál quieres saber primero? La mala es que, a menos que te saques la lotería o recibas una herencia, esto no va a suceder. La buena es que, con una estrategia y disciplina de tu parte, puedes lograrlo si te lo propones.
¿Estás dispuesto a trabajar para controlar tus deudas? Bien, a continuación, te propongo 4 pasos para que vivas tranquilo, al menos en cuanto a tus deudas se refiere:
- Lo primero que vas a hacer es revisar tus gastos y determinar aquellos que puedes eliminar o, al menos, disminuir. Utiliza el importe de ellos y agrégalo a lo que tienes destinado al pago de deudas.
- Dile adiós, por un tiempo, a tus tarjetas de crédito. Guárdalas muy bien, bajo llave.
- Determina cuál de tus deudas tiene el porcentaje de interés más alto y comienza por pagarla en mayor proporción que las demás.
- Enfócate a pagar mensualmente lo más que puedas. Olvídate, por ahora, de hacer compras o gastos extras. Con tus ingresos, cubre sólo lo indispensable; lo demás, destínalo a las deudas.
El tiempo que tardes en liberarte de las deudas dependerá del monto que debas y del ingreso que puedas dedicar al pago de éstas. Persiste y llegarás.
Cuando no pueden contratar un seguro, a varios de mis clientes les he sugerido esta estrategia. Les ha funcionado y ahora se sienten muy satisfechos por su logro. Me gustaría que quienes se encuentran en una situación como esta, asuman el reto de hacerlo.
Definitivamente, tendrás que hacer un gran esfuerzo, pero estoy seguro de que cuando lo logres dirás: “Valió la pena el sacrificio”.
Vivir sin deudas malas es lo mismo que vivir sin quejas. Te brinda una gran tranquilidad, lo cual te permitirá tomar mejores decisiones y, con ello, alcanzarás la felicidad.
Si tienes alguna pregunta, no dudes en comunicarte conmigo y, si me lo permites, puedo brindarte un seguimiento profesional para que saldes tus deudas.
Te deseo que seas feliz.
