3 aspectos para ser felices, cuando el destino nos alcance

Cuando tengo entrevistas para revisar la situación financiera de las personas, veo con más frecuencia que no les es posible adquirir un seguro, ni tener la posibilidad de ahorrar. Están viviendo al día.
Desde el punto de vista espiritual, todos los métodos para el bien vivir manifiestan la importancia “del aquí y el ahora”. Y eso está muy bien porque, como sabemos, el pasado ya no existe y el futuro es una incógnita. Lo único que tenemos es el aquí y el ahora.
Pero en el aspecto financiero, vivir el hoy y olvidarnos del futuro es un grave error.
Probablemente habrás escuchado que todos tenemos un viejito que nos viene persiguiendo y que, en algún momento, nos va a alcanzar.
¿Cómo quieres ser y estar cuando ese viejito te alcance? ¿Qué estás haciendo ahora para preparar ese momento?
Hay tres aspectos a considerar para cuando lleguemos a esa etapa:
- SALUD. Cuidar de la salud es primordial. Llevar una buena alimentación, hacer ejercicio y, en la medida de lo posible, disminuir el estrés, ayudará a tener una buena salud. La meditación, el yoga o la técnica de relajación que mejor se adapte a tu estilo de vida, será de mucha utilidad para bajar el estrés.
- RELACIONES. Mantener una buena relación con tus familiares y amigos también te brindará satisfacciones. Además, contarás siempre con su apoyo para esos momentos difíciles de la vida, cuando necesitamos a alguien a nuestro lado que nos ayude con sus consejos o, simplemente, escuchándonos.
- DINERO. Ni qué decir del dinero. Dicen que el dinero no compra la felicidad de las personas… pero cómo ayuda. Definitivamente, el dinero es indispensable en todo momento de nuestra vida, pero, sobre todo, cuando ya no estamos en posibilidad de trabajar o las empresas ya no nos contratan por nuestra edad.
Ojalá tuviésemos una bola de cristal para conocer nuestro futuro; desafortunadamente no es así.
Hay algo que sí podemos hacer. Está en nuestras manos. Y sólo nosotros lo podemos lograr. Consiste en cuidar de cada uno de los tres aspectos mencionados.
En relación con el dinero, anteriormente, las personas contaban con el apoyo de su pensión del IMSS o del ISSSTE, pero ahora el cambio a las Afores ha disminuido el monto de lo que se recibirá como pensión.
Además, en los últimos años, a muchos jóvenes se les ha contratado bajo el esquema de honorarios, perdiendo así la posibilidad de, al menos, contar con una muy pequeña pensión.
Para todos aquellos menores de 40 años, les recomiendo que revisen muy bien su situación laboral y cuánto podrían recibir de su Afore, si es que la tienen, para el momento de su retiro.
Contar con un Plan de retiro personal es la mejor opción para ser felices en la vejez.
Con gusto lo podemos platicar y encontrar la mejor opción para ti. Envíame un mensaje o un correo y lo vemos.